Es uno de los tipos de violencia más frecuentes: es el femicidio, cada día mueren en el mundo cientos de mujeres en manos de sus parejas.
También los hombres son víctimas de violencia de género aunque en menor proporción.
1-Infórmate del tema
Al principio puede parecerte inútil, pero te sorprenderías de la cantidad de personas que desconocen aspectos cruciales sobre la violencia familiar.
Esa ignorancia puede transformarte en una víctima indefensa.
Leer publicaciones en distintos sitios web, o hablar con profesionales puede ayudarte a identificar y prevenir situaciones de violencia.
2-Genera y fomenta un ámbito de respeto
Como integrante de la pareja y de una familia, siempre debes comunicarte con respeto. No hay razón ni circunstancia que justifique un maltrato físico o psicológico.
Ten presente que el respeto no solo implica hablar sin gritar por ejemplo, también significa saber aceptar las diferencias; ser tolerante frente a lo que no nos gusta, sin que eso implique que lo aceptemos a cualquier precio.
3-No consientas la violencia física
Así sea una mera cachetada o un simple tirón de brazo, por ejemplo, nunca lo permitas. Si te ha ocurrido una vez, no permitas jamás que eso se repita.
La decisión de alejarte del agresor o incluso de presentar una denuncia por agresión física es tuya, y si deseas dar una segunda oportunidad también estás en tu derecho. Pero no confundas las situaciones, y lo más importante no te confundas tú.
Está probado que cuando se acepta esta situación una vez, comienza un proceso de “normalización de la situación”.
¿Qué significa esto? Qué comienzas a relativizar el daño y a pensar que tal vez no fue tan importante. Por no enfrentar otro tipo de problemas, comienzas a asumir este.
4-Plantea claramente tus posiciones
La violencia física es la más evidente, pero la psicológica puede estar “camuflada” bajo diferentes formas y es mucho más frecuente de lo que se cree.
Muchas veces puedes caer en el grupo de las mujeres que por temor a perder a su pareja, optan por callar, por ser completamente sumisas.
O simplemente piensan “no quiero generar más problemas”, “mejor le digo que sí y listo”.
Si piensas diferente, encuentra una forma de decirlo firmemente, con respeto y con claridad.
5-Construye un proyecto de dos personas
Toma una actitud según la cual la pareja sea un proyecto de ambos miembros.
Comunica cómo te gustaría que funcione la vida en pareja y llegar a acuerdos. Ex muchos problemas que se pueden evitar si conoces cómo actuar.
Esto fortalece un espíritu de unión entre ambos, en el que los dos se sienten apoyados y compañeros de ese gran proyecto.
ESPERO DE TODO CORAZÓN QUE TODA ESTA INFORMACIÓN SIRVA PARA PREVENIR ESTA ENFERMEDAD LLAMADA VIOLENCIA, DIOS CREO AL SER HUMANO PARA QUE VIVIERAN EN PAZ Y ARMONÍA, ESPERAMOS QUE ALGÚN DÍA SE LOGRE
BENDICIONES